La obra, definida como el símbolo de la feminidad y la sensualidad, ha sido objeto de inspiración de numerosos artistas como Rubens, Ingres y Édouard Manet. El lienzo fue encargado a Giorgione por Girolamo Marcello con motivo de su boda con Morosina Pisani en 1507; por lo tanto, la pintura puede considerarse como una alegoría del matrimonio.
En el cuadro, la “ Venus durmiente ” Giorgione muestra en el lienzo, en primer plano, a la diosa, completamente desnuda, apaciblemente recostada sobre un lecho de tela roja y ropajes blancos.
La diosa aparece dormida con un brazo levantado mientras con la otra mano se cubre las partes íntimas, en clara referencia a Venus pudica. El cuerpo de la diosa, sensual y erótico, se perfila con formas suaves y armoniosas, y con pinceladas rosas.
Al fondo se puede ver, en perspectiva, un paisaje rural, un pueblo, árboles, cerros y un cielo con nubes hacia el atardecer. Los tonos cromáticos muestran una perfecta unión entre la belleza de la diosa y el entorno que la rodea, símbolo de ese tonalismo, o pintura tonal veneciana a través de la cual la aplicación del color, tono sobre tono, dota a la obra, en su conjunto, de profundidad. y efectos de luces y sombras.
Después de la muerte de Giorgione en 1510, Tiziano completó la pintura " Venus durmiente ", quien muy probablemente habría creado el paisaje en el fondo y un cupido a los pies de la diosa (luego borrado y hoy visible solo por radiografía). El propio Tiziano se inspirará en la " Venus durmiente " para la realización hacia el año 1538 de la obra " Venus de Urbino ".
Venus durmiente o Venus de Dresde
Giorgione
Año 1507-1510
Técnica Óleo sobre lienzo
Estilo Renacimiento
Tamaño 108,5 cm × 175 cm
Localización Gemäldegalerie Alte Meister, Dresde, Alemania
