Degas fue apodado el "pintor de bailarines". aunque tambien fue escultor como ya hemos publicado en La Vida es Arte. A partir de 1860, desarrolló una fascinación por la danza, que se descubrió originalmente en la Ópera de París, donde pasó mucho tiempo entre bastidores. Como resultado de su interés, sus pinturas retrataron a los bailarines en momentos privados detrás de escena, así como durante sus actuaciones en el escenario.
La de Degas es una historia de amor con sus musas vestidas con tutú. Edgar nació en julio de 1834 en París y sus pinturas de bailarinas más bellas, se exhiben en el Musée d'Orsay.
A partir de 1860, Degas frecuentó el backstage de la Ópera de París, con la que estaba familiarizado, formando parte de una familia de amantes de la música. De niño observaba a las bailarinas durante su entrenamiento con los ojos muy abiertos y siempre con lápiz y papel a mano.
El artista prefirió mirar a las bailarinas en momentos de intimidad, por ejemplo cuando estaban entre rutinas, durante las conversaciones entre ellas, cuando estaban cansadas y comenzaban a bostezar y mientras se ajustaban los corsés antes de las actuaciones. El vestíbulo del Palais Garnier era su patio de recreo; es donde pasaba horas observando a las bailarinas y sus profesores. Hizo de este lugar, que con demasiada frecuencia se asociaba con reuniones y encuentros sociales, su inspiración.
Con su ojo perspicaz, Degas describió el mundo de la danza altamente romantizado con un fuerte sentido de realismo. 1874 marcó el año en el que Degas presentó una obra íntegramente dedicada al ballet en la primera exposición impresionista. Pintó algunas piezas inspiradas en el ballet hasta 1880, ganándose el apodo de "pintor de los bailarines". Entre sus obras más famosas se encuentran La clase de ballet, Bailarín con ramo, Bailarines, Bailarín con ramo de flores y la Bailarina Verde, entre otros, que hoy te compartimos.
Todos conocemos a Degas el impresionista, con su pincel que afilaba los puntiagudos dedos de los bailarines, o su mezcla de colores pastel de una escena en vivo. Sin embargo, sobre todo, fue un visionario que revolucionó el arte de la pintura con la introducción del monotipo en sus obras. Se trata de una técnica que consiste en dibujar con pastel o gouache directamente sobre un lienzo entintado para crear un diseño único. A través de sus pinturas, esculturas y dibujos, Degas afirmó su gusto visceral por la experimentación.
LAS OBRAS
- La lección de baile 1871 - Edgar Degas
- The Dance Foyer en la Ópera en la rue Le Peletier 1872, Edgar Degas
- Bailarín con un ramo de flores inclinándose, 1878, Edgar Degas
- Bailarines en el escenario, 1876-1877, Edgar Degas
- Bailarina basculando (Bailarina verde) 1877-1879, Edgar Degas