Se cuenta que Venus, la diosa del amor, la belleza y el deseo, y Marte, el dios de la guerra, se enamoraron a pesar de estar en extremos opuestos de la naturaleza divina. Mientras que Venus simbolizaba la pasión y la atracción, Marte era la encarnación de la violencia y la destrucción. En la mitología, su amorío fue descubierto por el ingenioso Vulcano (Hefesto), esposo de Venus, quien los sorprendió en una trampa mágica para exponerlos ante el Olimpo, desatando las burlas de los dioses, como ya hemos contado en otra ocasión aqui
Venus y Marte, de Lavinia Fontana
Pero, más allá de esta historia de traición y vergüenza, algunos antiguos observadores del cielo notaron una interesante "danza" entre los planetas Venus y Marte. Al ser visibles desde la Tierra, ambos planetas aparecen a veces muy cerca el uno del otro en lo que se conoce como *conjunciones*. Estas conjunciones planetarias ocurren aproximadamente cada dos años y representan un momento astronómicamente significativo donde estos dos cuerpos celestes parecen acercarse en su recorrido por la bóveda celeste.
Marte y Venus de Guillemots
Para los antiguos, estas conjunciones fueron interpretadas como un símbolo del encuentro amoroso entre los dioses. La naturaleza cíclica y predecible de estos acercamientos, donde Venus y Marte "se encuentran" y luego se separan de nuevo, sirvió como un paralelismo para su relación en la mitología. Venus, el planeta más cercano al Sol, se muestra como el astro del amanecer o el crepúsculo, simbolizando la belleza y el misterio, mientras que Marte, más lejano y de un color rojizo intenso, evoca la violencia de la guerra.
En términos astrológicos, la combinación de estos dos planetas en una conjunción traía consigo una energía poderosa: la fusión de la pasión amorosa y la fuerza agresiva. Para los antiguos, estos encuentros celestiales podían ser vistos como momentos de gran intensidad emocional y física, donde los impulsos de deseo y combate se entremezclaban, representando el eterno conflicto y atracción entre el amor y la guerra.
Marte y Venus de Botticelli
Así, el mito y la astronomía se unieron en una narrativa rica y fascinante, donde los movimientos de los planetas en el cielo se alineaban con las historias de los dioses que los humanos habían contado durante generaciones. Este "baile cósmico" entre Venus y Marte sigue siendo una de las formas más poéticas en las que la mitología y la ciencia astronómica se entrelazan, recordándonos que, en la vastedad del universo, incluso las historias de los dioses pueden estar escritas en las estrellas.
Conjuncion de Venus y Marte junto a la Luna