En el corazón de la enigmática Capilla Sansevero de Nápoles, una figura de mármol capta la luz con una fragilidad casi imposible: La Modestia (Pudicizia), también conocida como La Modestia Velada o Castidad Velada. Creada en 1752 por el escultor veneciano Antonio Corradini, esta obra no es solo un testimonio del virtuosismo barroco, sino la pieza central de un profundo y personal drama familiar envuelto en un velo de filosofía oculta.
Corradini era ya un escultor de fama europea, habiendo servido al emperador Carlos VI en Viena. Fue llamado por el mismísimo Raimondo di Sangro, el excéntrico Príncipe de Sansevero, como cocreador y ejecutor principal del proyecto iconográfico de su noble templo. La Modestia, junto con El Cristo Velado (esculpido por su sucesor, Giuseppe Sanmartino) y El Desengaño (de Francesco Queirolo), forma el trío de excelencia artística que define la Capilla Sansevero.
El monumento está dedicado por Raimondo di Sangro a la memoria de su "madre incomparable", Cecilia Gaetani de L'Aquila d'Aragona, quien murió el 26 de diciembre de 1710, cuando Raimondo aún no tenía un año de edad. La pérdida temprana y la posterior ausencia (su padre, Antonio di Sangro, llevó una vida disipada, lejos de su hijo, antes de redimirse) forjaron en el Príncipe una necesidad de inmortalizar las virtudes que nunca pudo conocer de su madre.
El artista, que ya tenía experiencia en esculpir figuras veladas, alcanza aquí un alto grado de perfección. La figura de la mujer, con una pose clásica y una túnica que apenas insinúa sus formas, está cubierta por una capa impalpable de mármol. Corradini logra dar forma al velo con una elegancia y naturalidad tan extremas que el material pétreo parece transformarse en tela mojada, revelando los contornos del cuerpo y el rostro con una delicadeza sublime.
El Lenguaje Secreto de los Símbolos
La escultura no se limita a un retrato idealizado de la virtud. Está cargada de simbolismo que revela el dolor de Raimondo y su profunda inmersión en la filosofía esotérica.
- La mirada perdida en el tiempo: La expresión de la mujer es de resignación, pero también de una profunda sabiduría interior, ajena al mundo.
- La corona de rosas: Aunque las rosas suelen simbolizar la belleza y el amor, aquí están marchitas o inacabadas, aludiendo a una existencia interrumpida demasiado pronto.
- La placa rota y el árbol de la vida: La placa o lápida rota es un símbolo evidente de una vida cortada (la de Cecilia), mientras que el árbol que se vislumbra detrás es el Arbor Philosophica o el árbol de la vida, una alusión directa al proceso alquímico que Raimondo estudiaba.
El bajorrelieve en la base también se refiere explícitamente al tema de vida-muerte y la resurrección, con el episodio del Evangelio de Noli me tangere ("No me toques/retengas") en donde Cristo se le aparece a Magdalena como jardinero. Este es un guiño a la creencia en la trascendencia.
La Diosa Isis y la Verdad Velada
La intención de celebrar a la madre de Raimondo, aunque sincera, no es suficiente para explicar el complejo significado de esta escultura dentro del programa iconográfico de la Capilla Sansevero. La mujer cubierta por el velo, que alegoriza la Modestia y la Castidad, puede interpretarse en un nivel más profundo como una alegoría de la Sabiduría Iniciática o la Verdad Velada.
La referencia más poderosa es a la Isis Velada (la diosa favorita de la ciencia iniciática), un motivo clásico que simboliza la naturaleza que no debe ser profanada o el conocimiento esotérico que solo se revela a los iniciados. Una larga tradición académica sostiene que La Modestia se colocó precisamente en el mismo lugar dentro del templo donde se encontraba antiguamente una estatua de Isis, recordando que Nápoles (Neapolis en griego) fue una importante ciudad de culto a esta diosa egipcia.
Para el Príncipe Raimondo, conocido por su intensa actividad masónica y sus experimentos alquímicos, La Modestia no solo era un tributo materno, sino una clave para entender el viaje filosófico y espiritual que él diseñó en la capilla. El velo representa la barrera entre el mundo material y el conocimiento oculto que solo la razón y la fe (simbolizadas en otras esculturas de la capilla) pueden levantar.
Alquimia y Redención: El Árbol del Filósofo
El simbolismo del árbol que brota de la piedra desnuda, el roble que parece desafiar la dureza del mármol, es considerado por algunos estudiosos como una alusión directa al arbor philosophica, también conocido por los alquimistas como el árbol de la vida. Representa el opus alchymicum, el proceso alquímico de transformar la materia prima (la piedra) en la perfección (el oro o la sabiduría). Este proceso era visto como una etapa preliminar de la perfección espiritual a la que aspiraban los alquimistas, y encaja perfectamente con el ideal de Desengaño de su padre.
Corradini, con su habilidad única para manejar la transparencia del mármol, se convirtió en el artista ideal para plasmar el concepto de la Verdad Inasible. Se dice que pocos escultores se atrevieron a tallar el mármol de esta manera, ya que la finura del velo hacía que el riesgo de romper la pieza fuera altísimo. El escultor veneciano demostró no solo dominio técnico, sino una sensibilidad para el drama psicológico.
Son muchos los velos que cubren la verdad detrás de esta mujer y de la propia Capilla Sansevero. Los mármoles no son solo arte, sino crónicas codificadas de un príncipe obsesionado con la ciencia, la muerte y la trascendencia. La Modestia nos invita a mirar más allá de la superficie, a entender que la verdadera virtud, la auténtica sabiduría, está oculta y solo puede ser revelada a través de la introspección.
El poeta Francesco Petrarca, en su fragmento "Triunfo de la modestia", ya había escrito sobre la belleza envuelta, una idea que Corradini y Raimondo di Sangro llevaron a la perfección:
"Pasamos al templo de Pudizia, que se enciende en un deseo sincero,
no de la gente plebeya sino de la Patricia...
... ¡Feliz piedra que tensa la hermosa cara!
porque, entonces, ¿quién habrá vuelto a tomar su hermoso velo,
si fue bendecido quien la vio en la tierra,
ahora quién la volvería al cielo?"
Al final, "La Modestia" es el lamento de un hijo por la madre que nunca conoció y, al mismo tiempo, el intento de un científico y filósofo de codificar el conocimiento esotérico en piedra. Es un mármol que, al cubrir la carne, revela una verdad más profunda sobre la conexión entre la vida, la muerte y la búsqueda incesante de la sabiduría.
LA OBRA
Modestia Velada (Pudicizia)
Artista: Antonio Corradini
Material: Mármol
Fecha: 1751
Ubicación: Capilla Sansevero, Nápoles
